Redes de contacto, talleres de formación en temas de innovación y emprendimiento y experiencia para enfrentar el mundo laboral, son sólo algunos de los beneficios que obtienen los estudiantes de la Universidad de Concepción al participar del programa Desafío Conexión, iniciativa que los vincula con una de las empresas más importantes de Latinoamérica, la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones, CMPC. 

Durante 15 semanas alumnos de pre y postgrado de la casa de estudios penquista trabajan junto a un sponsor de la papelera para resolver desafíos, proyectos de corta duración propuestos por las distintas filiales de la compañía. Tras una puesta en marcha 100% online en 2020, en su segunda versión, el programa impulsado por la Plataforma de Emprendimientos Tecnológicos de la Universidad de Concepción, IncubaUdeC, ha combinado la realización de actividades en formato presencial y virtual.

Para Fernanda Díaz de Arcaya, coordinadora del Desafío Conexión, la posibilidad de visitar las instalaciones de la empresa ha propiciado que los estudiantes conozcan de primera fuente cuál es el problema que están resolviendo. “Les permite entender los procesos productivos de la compañía, vincularse con sus sponsors y comprender la magnitud del impacto que están generando. Creo que se han dado cuenta de que como estudiantes UdeC tienen todas las capacidades y el talento para resolver los distintos desafíos que les plantea una empresa grande como CMPC”.

Protagonistas valoran el proceso 

 

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de IncubaUdeC (@incubaudec)

“Recibí un correo de la Universidad con la invitación a participar en este proyecto, como estoy en el último semestre de mi carrera (Ingeniería Ambiental) tomé el desafío como una oportunidad de visualizar como sería el campo laboral y me llevé una grata sorpresa al darme cuenta de mis habilidades. Creo que todo estudiante de pregrado debería vivir esta experiencia antes de graduarse. Me ha servido para llevar a la práctica lo que he aprendido y además para desarrollar habilidades como el trabajo en equipo”, indicó Cecilia Muñoz, alumna de quinto año que participa del Desafío Conexión.

Sofía Marín, estudiante de Ingeniería Civil Industrial, es otra de las participantes del “DCC”. Junto a Cecilia buscan resolver el “Análisis de ciclo de vida”, desafío que tiene como objetivo dar a conocer las posibles consecuencias ambientales vinculadas al uso de las bolsas de papel Sack Kraft. “Vivir esta experiencia me permitió ampliar mis conocimientos. Con mi compañera de equipo logramos compatibilizar nuestras capacidades y conseguimos sacar adelante un desafío que puede generar un cambio en una empresa grande como CMPC”, señaló.

La búsqueda de soluciones innovadoras y el descubrimiento de nuevas líneas de investigación representan un aporte fundamental para la compañía, que a través de estas acciones colaborativas busca potenciar su estrategia de desarrollo sostenible.

La búsqueda de soluciones innovadoras y el descubrimiento de nuevas líneas de investigación representan un aporte fundamental para la compañía, que a través de estas acciones colaborativas busca potenciar su estrategia de desarrollo sostenible. 

Camila Quezada cursa un Doctorado en Ciencias e Ingeniería de Materiales, se enteró del Desafío Conexión gracias a un comunicado de IncubaUdeC y a Manuel Meléndrez, su profesor guía quien la animó a formar parte. “Estoy muy agradecida de poder participar, sin dudas ha sido una experiencia enriquecedora para mi carrera profesional, primero por el vínculo que se genera con el área de industrias, donde se pueden poner en práctica los conocimientos adquiridos durante la carrera y segundo por el trabajo en equipo con personas de diferentes disciplinas, lo que permite abordar las problemáticas del desafío desde distintos puntos de vista”.

La futura doctora trabaja con estudiante de Ingeniería Civil Química Danilo Martínez, juntos deben resolver el desafío “Repelencia a partículas de cemento”, proyecto que surge ante la necesidad de evitar que estos fragmentos se adhieran a los sacos de papel. Al respecto, Camila indica que se han afianzado muy bien. “La colaboración ha sido recíproca y se ha logrado unir las ideas de nuestras disciplinas. Además, el equipo que gestiona el Desafío Conexión te acompaña en todo momento, te orientan, hay una ayuda constante por parte de ellos. El mensaje para otros estudiantes es que se animen y se atrevan a poner en práctica sus conocimientos”.

Para Danilo participar del Desafío Conexión ha sido como su nombre lo indica “un enorme desafío a mis aptitudes y conocimientos de Ingeniería, me ha obligado a indagar e innovar en nuevas ideas para solucionar una problemática que afecta tanto a CMPC como a la industria cementera nacional. Todas las propuestas han sido discutidas con mi compañera, su responsabilidad y compromiso han sido fundamentales. Recomiendo totalmente esta experiencia. Hace un tiempo tuve la oportunidad de conocer Forsac Chillán, filial de CMPC y actualmente estamos gestionando una visita a la planta Santa Fe para conocer su proceso productivo y hacer análisis en laboratorios que son necesarios para nuestra investigación”, comentó.

La tercera semana de diciembre se llevará a cabo la ceremonia de cierre de la segunda versión del programa, evento en el que las y los participantes presentarán sus trabajos y pitchs. “Hasta el momento no hemos enfrentado ningún tipo de inconveniente, los estudiantes han sido capaces de trabajar en equipos multidisciplinarios y los sponsors han estado muy comprometidos para ayudarlos y entregarles toda la información que requieran. Esperamos que durante la jornada final puedan mostrar a la comunidad los resultados que obtuvieron a lo largo de estas 15 semanas de trabajo», indicó Fernanda Díaz de Arcaya.